Antiguo Egipto parte VI: el legado de Akhenatón parte II.

La historia de Akhenatón es enrevesada y apasionante, y aunque sus actos provocaron pesar y dolor también fueron actos revolucionarios para su época, una religión monoteísta, esta entrada y otra se las dedico enteramente a este faraón tan enigmático y a su legado. En la parte anterior se descibrio su reinado pero ahora nos centraremos en su sucesor y su esposa.

Después de la muerte de Akhenatón Nefertiti se cambio el nombre a Nefer Nefer-Wuaton y se convirtió en una mujer faraón mientras el hijo sucesor, Tutankamon crecía. Cuando este creció reclamo el trono y cuando lo tubo apenas tenia 10-11 años, intento tener hijos con su hermana lo que dio lugar a los fetos momificados que se encontraron en la tumba del niño rey.





Aunque Tut es famoso por ser una de las dos únicas tumbas de faraones egipcios encontradas intactas, solo vivió hasta los 18 años, y no hizo grandes logros arquitectónicos eso si, restableció el orden en el Imperio Egipcio, y clamo en contra de los actos de su padre erigió estelas donde enumeraba todos los delitos de su padre, ya que estuvo apunto de destruir el Imperio Egipcio.
Su nombre se borro de la lista de faraones egipcios y si hoy lo conocemos es gracias a su capital y los bloques talatats.

Y aquí acabo su historia, no sabemos por que actuó así. Gente que hablo con el afirman que lo guió espiritualmente, tal vez fue demasiado avanzado para la época, sin embargo sabemos que Akhenaton tenia un par de defectos, como podréis observar tiene el cuerpo un tanto deformado hay teorías de que tenia el síndrome de marfan, este síndrome afecta a los huesos y otras partes del cuerpo deformándolas, por eso tenia los dedos muy largos al igual que la cara. Pero eso no es todo, también tenia cataratas, es decir que no veía muy bien, y algunos egiptólogos creen que el motivo por el que adorara al disco solar es por que solo si miraba al sol o lo bañaban sus rayos podía ver.